Un Obelisco mancillado
Como
consecuencia del remodelamiento de la avenida Ildefonso denominado anteladamente
por Hatun o Sequia Grande de esta localidad y que dio origen para que se
destruyera completamente el vistoso obelisco edificado por la Municipalidad
Provincial de Chincha con el fin de perennizar la memoria de los paladines que
a su manera, bregaron en infausta Guerra
del Pacífico.
En la placa
recordatoria hecha de mármol figuraban los nombres de aquellos personajes que nos
dejaron un nidio ejemplo de patriotismo, amor y dignidad por esta bendita
tierra benemérita y leal a la patria.
Destellándose
entre ello ante José Santos Grocio Prado Lunares, José Andrés Pachas Hernández
(Picuy), Domingo Castilla Avalos, Dominga Retes Melchor, Santiago Avilés
Contreras, Mariano Pachas Gutiérrez,
Tarsilio Ramírez Ramírez, Manuel Bonilla Lunares, Juan C. de Mora, Agustín Mondragón,
Tomas Orellana, Jeremías Sosa, Orelio Sotelo, Braulio Loli, Calixto Ugarte,
Francisco Fuentes, Felipe Ma-tías, Braulio Ochoa, Capitán Durand, Santiago
Castillo, Mariano Mejía, Simón Zapata, Pablo Zapata, Ramón Ortiz, José María
Magan, Livio Clivio Rocca Bergallo, Vicenzo Andreas.
Amoretti Oneglia
y otros exponimus mártires que por falta de investigación no se mencionan en
las páginas inmaculadas de la historia chinchana.
Por eso
muchas veces la opinión pública quiere conocer de cerca, lo que está
ocurriendo, ya que existieron algunos burgomaestres que en su gobierno municipal
se construyeron trabajos de envergadura en beneficio de la comunidad; para que
posteriormente llegaran autoridades ediles que luego de demolerlos el susodicho
obelisco sobre la misma base se construyeran el nuevo remodelamiento de la
mencionada arteria.
Ojalá en el
presente gobierno edil trate por todos
los medios posibles la reposición de este pedestal y de esta manera justificar
la memoria de estos ilustres personajes que demostraron su patriotismo por
defender la dignidad de este pueblo y que no queden en el olvido.
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