Desde hace algunos meses atrás
diferentes calles de Chincha se vienen literalmente hundiendo paulatinamente
por culpa de roturas internas de cañerías de aguas servidas y agua potable, y
para sorpresa y gran indignación de muchos chinchanos que repudian ese feo
ornato” de la ciudad, ninguna autoridad hasta el momento se pronuncia sobre
este grave caso que puede traer más adelante serias consecuencias.
Al parecer pues ciertas autoridades
correspondientes son sordos, miopes, y mudos, principalmente el señor gerente
de la empresa Semapach a quien, mediante vía telefónica, radial televisiva
(algunos que se callan no sabemos por qué), y medios escritos, se les ha hecho
saber lo real y desastrosa situación que vive la población, y hasta el momento
todo sigue de mal en peor.
El agua “Potable” brilla por
su ausencia en todas partes, no hay seguridad si este vital líquido, podría
estar contaminado, y otros temas inherentes que podría dañar nuestra valiosa
salud.
En tanto, como prueba fehaciente
a lo que decimos, ahí están discurriendo día a día las aguas servidas de las
que hoy nos ocupamos, y si existiera algunas dudas al respecto, algún
funcionario de la referida empresa Semapach, puede acercarse a la primera
cuadra de la calle Ayacucho, donde podrá apreciar en plena pista tres hoyadas
formadas por la filtración del agua potable que emergen de las cañerías rotas,
y de la matriz principal, y si usted camina unos metros más adelante hasta
llegar a la intersección de la misma calle Ayacucho y Chavín, también existe (o
mejor dicho no existe) un trozo de vereda que ha sido resquebrajado por el
discurrir de aguas malolientes que perjudica el tránsito normal de peatones.
De los otros lugares dañados
por esas aguas ya no lo podemos describir porque pensamos que usted también lo
sabe.
Como nosotros sabemos que una
autoridad de cualquier área de la función que desempeña, no debe ser solamente
de oficina sino también de campo.
L. P. M.
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