Por: Ed. Dr. Claudia
Viveros Lorenzo
Origen: Veracruz
Nos hemos quejado mucho, pero el hecho
es, que aquí seguimos y lo hemos logrado. Algunos por desgracia han tenido la
mala suerte de ver partir para siempre a un ser querido, pero aquí siguen y eso
los ha vuelto sobrevivientes.
Sí, somos cada uno de nosotros, que
estamos hoy aquí, sobrevivientes de una emergencia sanitaria mundial que ha
desencadenado por completo, nuevas normatividades. Somos protagonistas de un
momento histórico que seguramente será clasificado, estudiado, y recordado por
mucho tiempo. Obvio, si nos hubiesen puesto a elegir, entre vivirlo o no, lo
hubiésemos pasado por alto sin dudarlo. Pero el hecho es que llegó, se quedó y
no tiene para cuando. Y cada uno de nosotros a su manera ha sobrellevado la
situación lo mejor que su entender lo ha dejado. Jamás pudimos imaginar vivir
lo que hemos vivido las últimas 52 semanas, las películas de ficción que
trataban de temas similares por mucho se quedan cortas en plantear los montones
de escenarios que nosotros hemos tenido que lidiar.
Y no hay más que agradecer por la
experiencia. Aunque parezca loco es así. Que afortunados somos por ser testigos
y seguir aquí. Por ser tan fuertes y resilentes. Por seguir en pie de lucha
adaptándonos, proponiendo y restructurándonos para seguir de frente y sin
parar.
Por algo es que, seguimos y para algo
muy bueno, es que no nos hemos ido. Los que no tuvieron esa fortuna, también
han realizado su función en nosotros. Gracias a ellos tendremos que recordar
día a día, que la vida es un suspiro y que debemos aprovecharla al máximo pues
no sabemos nunca cuándo terminará, muchas veces incluso sin ningún motivo o
precedente se puede ir de las manos. La lección todo el mundo la realza y es:
apreciar todo lo que se tiene. Agradecer por ello. Disfrutar de lo que no
cuesta nada y es lo más valioso. Conservar nuestra salud por encima de todo.
Cuidar de los seres amados.
El mundo que conocemos no es infalible,
no hay nada hecho por la mano del hombre, que tarde o temprano el tiempo no destruya.
Todas nuestras seguridades pueden tambalearse, debemos ser adaptables y no resistirnos
al cambio. Estamos viviendo nuevos tiempos y debemos dejar de pensar en el
retorno. Al contrario necesitamos producir nuevas dinámicas y entender que lo
de atrás, ahí quedó.
2.6 millones de muertos y más de 119
millones de infectados alrededor del mundo nos ha dejado hasta la fecha el
SARS-CoV-2. Jamás lo pudimos imaginar, pero ya fue… y es.
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