La provincia de Chincha continúa con desorden y las autoridades que pueden solucionar este problema, aún no lo hacen.
Nadie -por
ejemplo- puede ignorar que las aguas servidas se ven continuamente y que ello
puede perjudicar el paso por determinadas vías y también provocar serios
accidentes de tránsito que lamentar, como es el caso de la calle Ayacucho
(primera cuadra).
Otra situación es la falta de señalización en ciertas vías principales, así como también el mantenimiento periódico que se debe dar a los semáforos que no funcionan, y que puede igualmente pueden ocasionar aparatosos accidentes vehiculares, como se ya se han registrado en la provincia, incluso con saldos graves a ocupantes de vehículos mayores y menores.
Los desmontes
dejados o abandonados en vías públicas es otro tema que preocupa, como el que
actualmente se encuentra desde hace varios días en la novena cuadra de la Av.
Massaro, lugar cercano al establecimiento La Playita.
Lo mismo sucede
en la tercera cuadra de la Av. Victoria
a escasos metros del colegio Cooperativo, donde el propietario de una
empresa de confecciones, ha permitido no sabemos porque, que trabajadores de
una empresa de servicios co-loque un medidor para su establecimiento, el mismo
que está ocupando la mitad de la vereda, no importándole que las personas
tengan que bajar de la vereda para continuar en la pista con el peligro de que
puedan ser atropellados por algún conductor.
Por último, en
la 4ta cuadra de la calle Ayacucho, un vecino del lugar ha hecho instalar una
conexión de agua potable permitiendo a los trabajadores (no sabemos si son de
Semapach o algún particular) que zanjeen la calle para dejar finalmente
ho-yadas llenas de tierra y no como lo encontró.
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