Observar e identificar las señales de alerta es clave para prevenir fallecimientos por suicidio, recibir tratamiento oportuno en salud mental y salvar vidas
De acuerdo al
Sistema Informático Nacional de Defunciones (Sinadef), durante el 2021, 1 de
cada 5 casos de fallecimientos por suicidio que ocurrieron en el país fueron
de adolescentes, informó María del Pilar Luna, psicóloga de la Dirección de
Salud Mental del Ministerio de Salud (Minsa) durante la charla virtual
“Suicidio en adolescentes: lo que deben saber los padres”.
La especialista
invocó a los padres y madres de familia a estar atentos ante cualquier cambio
de comportamiento o señal de alerta en sus hijos para acudir a tiempo al
establecimiento de salud más cercano, a los Centros de Salud Mental
Comunitaria (CSMC) del Minsa o llamar a la Línea 113 opción 5 que atiende las
24 horas del día, todos los días del año.
Durante su
intervención en la charla, el Dr. Nefi Campos, neuropsicólogo mexicano con
amplia experiencia en la atención de este tipo de casos, afirmó que la persona
con conducta suicida enfrenta una enfermedad mental que anula su instinto de
supervivencia y re-quiere diagnóstico y tratamiento por parte de un equipo
inter-disciplinario, integrado por psiquiatras, psicólogos, enfermeros,
trabajadores sociales, entre otros.
“Un adolescente con conducta suicida presenta
ciertas señales relacionadas, como el insomnio (duerme de día y está despierto
de noche), se muestra irritable; es decir, se pelea o discute con las personas.
Sufre de estrés y empieza a tener enfermedades físicas de origen psicológico
como dolor de estómago, dolor en la espalda y de cabeza. No se levanta de la
cama, deja de disfrutar de todo lo que antes hacía, tiene pensamientos
negativos y se obsesiona con la idea de la muerte”, señaló.
El especialista
indicó que cuando vemos a un joven con comportamiento suicida, no es que esté
tratando de llamar la atención o quiera molestar. “Tienen que preguntarse si su
hijo tal vez padezca de una enfermedad mental de tal magnitud, que llegue a
cambiar su pensamiento y verlo todo oscuro, pensando que la muerte es la única
solución. Si nuestros hijos están pasando por alguno de estos padecimientos hay
tratamientos eficaces que les pueden ayudar a recuperarse y tener una mejor
calidad de vida y llevar su existencia de una forma normal", agregó.
Por su parte,
Gabriela Rodríguez, fundadora de la Asociación Líderes Voluntarios Amor,
Respeto, Optimismo (ALVARO) dedicada al apoyo de jóvenes en el área de salud
mental, compartió su experiencia de vivir y apoyar a un adolescente con
conducta suicida.
“Hay mil
indicadores, uno como padre o madre se da cuenta que algo está mal con nuestro
hijo cuando no sale de su cuarto, no quiere conversar, bloquea sus redes
sociales, bota o regala sus pertenencias, tiene malhumor, pierde motivaciones y
deja el colegio, la universidad”, expresó conmovida.
Rodríguez
recomendó a las familias a estar atentas y reaccionar a las señales de alerta,
informarse, buscar ayuda profesional y fomentar la unión familiar pasando
tiempo juntos con amor y buena comunicación.
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