Por: Victor Campos Ñique
Semanas antes de fallecer el exalcalde del distrito de Alto Larán, don Alberto Magallanes Mendoza, con resolución municipal creó un mercado, que se encuentra ubicado en el frontis del estadio municipal, ante la necesidad que la población pueda abastecerse lo más cercano a su zona y no esté trasladándose a otros lugares con el riesgo de contagio, es que en el mes de abril se apertura este mercadito que hoy sigue funcionando y está al servicio de toda la comunidad altolareña.
Los propios
comerciantes decidieron ponerle al mercado el nombre de “Alberto Magallanes
Mendoza” como un home-naje a quien fue el impulsor de esta iniciativa.
Desde entonces
el mercado viene funcionando normalmente, aunque la afluencia del público no
siempre es la misma.
Ciertamente la
instalación de un mercado en distrito sirve para, entre otras cosas, descongestionar
el mercado de abasto de la avenida Benavides en Chincha Alta y es por ello que
la población se vuelca a este tipo de espacios para adquirir sus productos de
primera necesidad.
El mercadito de
Alto Larán, como suelen llamarle, tiene
de todo: verduras, frutas, carnes diversas, menestras, condimentos,
manualidades, hasta plantas. Y también reciben ayuda de diferentes formas. Por
ejemplo, el año pasado la Asociación de Niños y Jóvenes Ambientalistas “Gotitas
de Miel”, que preside María Cecilia Almeyda Magallanes, obsequió mascarillas a
todos los comerciantes, mientras que el hijo del recordado “Ñaca”, Carlos
Magallanes Ramírez repartió Ivermectina durante varias semanas.
Incluso la
Asociación “Gotitas de Miel” al ser un Espacio de Lectura del Ministerio de
Cultura ha llevado al mercadito un módulo de libros para que no sólo los
comerciantes sino también el púbico puedan disfrutar del placer de la lectura
con excelentes textos. El actual alcalde del distrito, Fidencio Lliuya Laura,
llegó al lugar y leyó de forma fugaz el reciente libro del docente y escritor
altolareño Eugenio Magallanes Vilca, que lleva por título “Alto Larán. Una
identidad chinchana”.
Las personas que
integran la asociación de comerciantes son conscientes que hay aspectos por
mejorar y están dispuestos hacerlo poco a poco. Pero también requieren que se
le siga incentivando y motivando y una manera de hacerlo es yendo a comprar y
adquirir sus productos para que puedan salir adelante y progresar. Los tiempos
son difíciles y es precisamente por ello que se tiene que expresar nuestra
solidaridad.
Apoyar a los
comerciantes de la zona trae una serie de ventajas y beneficios y nuestros
amigos del mercadito de Alto Larán están a la espera de la generosa y gentil
visita del público y ellos los sabrán atender como buenos chinchanos y especialmente
altolareños: de corazón y con un trato esmerado.
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