Por: Oscar Velit
Bailetti.- Especialista en Seguridad Ciudadana
La violencia que padecen las mujeres no debe
ser interpretada como la expresión de un conflicto privado propio de las
relaciones de la pareja, sino como un grave problema público, ya que constituye
un atentado contra los derechos hu-manos y los valores que legitiman el sistema
democrático.
Los abusos hacia las mujeres no podemos
entenderlos como hechos aislados, tenemos que analizarlos en el contexto social
e ideológico en el que se originan y desenvuelven. Y que se materializa entre
otras en la estructura tradicionalmente jerárquica del matrimonio y la familia;
en la división sexual del trabajo y en la precariedad laboral femenina. Y/o en
la devaluación de las relaciones afectivas.
En el
Perú aumenta cada vez más la violencia, y los asesinatos o feminicidios de
mujeres a manos de su pareja o exconvivientes. Muchas mujeres no hacen la
denuncia por maltrato. Es preciso hacer frente a esta lacra social desde el
esfuerzo colectivo. Como sociedad democrática, debemos detectarla,
visibilizarla, contando con las Juntas Vecinales que están más cerca de estos
casos. Para ofrecer protección y reparación a las víctimas, penalizar legal y
socialmente a los culpables. Debemos poner las bases para su erradicación,
fomentando la educación para la igualdad y el respeto mutuo entre los sexos,
generando una nueva cultura de igualdad y corresponsabilidad entre los sexos.
Es nuestra responsabilidad colectiva e individual de todos, no solo de
autoridades.
El día 25 de noviembre fue el “Dia
Internacional para la eliminación de la violencia contra las mujeres”. Hoy
quiero recordar lo que dijo una vez Dn. Kofi Annan, Secretario General de la
ONU. “Recordemos hoy que la acción para eliminar la violencia contra las
mujeres es responsabilidad de todos nosotros: la familia de las Naciones
Unidas, los Estados afiliados, la sociedad Civil y cada hombre y mujer. Este
día nos brinda la oportunidad de comenzar a construir un nuevo mundo libre de
violencia contra las mujeres y las niñas, una era en la cual la humanidad
entera sabe que, en lo que se refiere a la violencia contra las mujeres y las
niñas, no hay bases para la tolerancia ni existen excusas tolerables”.
Respetemos a la mujer; la violencia contra
las mujeres es definida como el crimen contra la humanidad más extendida,
tolerada e impune. No permitamos un grado de complicidad social, vacíos
legales, o una representación mediática que conlleva el reforzamiento de las
“razones” de los agresores y la culpabilizaciòn de las víctimas.
Has algo, hagamos algo, no calles la
violencia contra las mujeres, lejos de erradicarse, va en aumento.
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