A tres días de su repentina desaparición, la tarde de
ayer martes (5:30 p.m. aprox.) fueron encontrados flotando en un pozo de agua,
los restos mortales del empleado de servicio del colegio Latinoamericano, Luis
Enrique Apolaya Lévano, de 35 años de edad.
La triste noticia las dieron, lamentablemente, los
propietarios del inmueble donde fue hallado el occiso, ubicado exactamente en
el barrio Liguria, sector del distrito de Grocio Prado, en Chincha.
Extraoficialmente se conoce que la citada casa,
situada en una curva cerrada, permanece los más de los días cerrada, y que los
dueños que son de la tercera edad, no llegan con mu
cha frecuencia a su predio, por esto, tal, vez, el
hallazgo del finado demoró algunos días.
Su cuerpo
estaba hinchado y con signos de descomposición. El Ministerio Público dispuso
se practique la necropsia de ley y dado el grado descomposición serían
sepultados en las próximas horas en el cementerio general de Chincha.
Hasta el cierre de esta edición, aún no existen una
cabal explicación de lo sucedido, por lo cual surgen las siguientes interrogantes:
¿cómo ingresó la víctima a ese predio de paredes altas y puerta cerrada? ¿Acaso,
por la falta de agua potable, quiso agenciarse de este elemental y necesario
líquido? o habría sido asesinado tal vez por elementos que viven al margen de
la ley.
Estas preguntas u otras serían descifradas en los
próximos días por las autoridades que vienen investigando éste lamentable caso.
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