miércoles, 11 de diciembre de 2013

“A la policía se la respeta” frase que muchos no la entienden


El exceso de libar licor, muchas veces conduce a cometer ciertos errores en la vida, que luego nos hace lamentar permanentemente.
Esta sentencia le cae al joven David Jaime Rapri López (20), quien el pasado lunes (0.30 a.m.) -según se afirma-, se encontraba libando licor en el pasaje quinta Pachas, sito en la cuarta cuadra de la calle Rosario, en Chincha Alta.
La desmedida ingesta de alcohol que habría consumido el acusado y un amigo desconocido que lo acompañaba, hizo que ellos protagonizaran un es-cándalo en plena calle, al punto que uno de los vecinos llamó de inmediato a la central de Serenazgo de Chincha (267642), cuyos efectivos se constituyeron en el acto en el lugar.
 Los serenos al tratar de calmar los ánimos a estos sujetos, ellos por el contrario prestaron oídos sordos al pedido, y más bien continuaban con sus escándalos, vociferando palabras soeces.
Esta cerrada actitud de los jóvenes, obligó a que los Serenos solicitaran el apoyo de la policía, quienes al instante una unidad móvil con dos miembros policiales acudieron a la escena del laberinto.
El suboficial Fredy Molina Chuquispuma, luego de descender del patrullero, se acercó pacíficamente a Jaime Rapri, y lo instó a que se apaciguara y no siguiera haciendo escándalo, porque a esa hora los vecinos se encontraban descansando.
Estas palabras de persuasión de nada le sirvió al policía, ya que en respuesta a ello, Jaime Rapri le descargó un derechazo en la cara al agente profiriendo amenazas.
Ahora, el fiscal de Chincha ha formalizado la denuncia policial y luego el presunto autor, ha sido derivado al juzgado de Chincha. Todo por libar licor y protagonizar escándalo en plena vía pública. 


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