En la vivienda signada con el
número 685 de la Av. América en Chincha, se velan los restos mortales de
Maximiliano Pachas Apolaya, de 57 años de edad. Su deceso se produjo ayer, en
el hospital Essalud de Ica.
Esta ingrata noticia que trascendió
rápidamente entre familiares y amigos, fue confirmada por la señora esposa del
finado, Rosa Lévano Pachas (61), docente cesante, quien precisó que hoy miércoles,
a las 3 p.m., se le dará cristiana sepultura en el cementerio general de
Chincha.
Pero antes -agregó- el cotejo
fúnebre se dirigirá a la imprenta del señor Carlos Betancourt, ubicado en la
primera cuadra de la calle Chavín, en Chincha Alta, donde sus compañeros de labores,
con quienes trabajo por varios años.
Maximiliano Pachas Apolaya sufrió
un atragantamiento el último domingo, al ingerir chicharrón, carne de cerdo,
cuando se encontraba en su hogar (3:10 de la tarde) celebrando el Día del Padre
con toda su familia.
En vano fueron los esfuerzos de
los familiares, quienes les brindaron los primeros auxilios.
Luego de este lamentable caso, el agraviado fue
conducido al Hospital San José de Chincha, donde se le dio la asistencia profesional
requerida, extrayéndosele el trozo de alimento que obstruía su cavidad bucal,
pero aún así no pudo recuperar la conciencia, porque su cerebro -al cabo de
varios minutos- no recibió la debida oxigenación. Diagnóstico que fue prescrito
por los galenos especializados del nosocomio iqueño.
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