Corte Superior de Justicia de Ica llevó regalos a madres adolescentes de albergue “Camino a la Solidaridad”: Chincha

DR. MENESES GONZALES AGRADECIÓ A NIÑOS POR SUS SONRISAS PURA

Sonrisas de los niños, aplausos de sus madres y agradecimiento general hubo el miércoles 22 de este mes, en el albergue “Camino a la Solidaridad”, situado en Chincha, luego de que la comitiva encabezada por el doctor Bonifacio Meneses Gonzales, Presidente de la Corte Superior de Justicia de Ica (CSJI) les entregara juguetes, ropa y alimentos. 

“Las sonrisas de los niños que hemos originado con los regalos que hemos traído son premios más que suficientes y valen cualquier acción que se haga por más esfuerzo que cueste”, fue una de las expresiones vertidas por el doctor Meneses Gonzales, titular de la Cote Superior de Justicia de Ica

A su turno, el doctor Eusebio Avilés Diestro, Juez Titular del Juzgado de Familia de Chincha, resaltó el espíritu de colaboración de los magistrados, personal jurisdiccional y administrativo de las diversas sedes de la Corte “porque inmediatamente que se les convocó contribuyeron con sus valiosos obsequios.

“Mientras tanto –añadió- ya saben que pueden contar con nosotros para la administración de justicia porque velaremos porque ustedes y vuestros hijos tengan los derechos que les corresponda”.

Por su parte, la señora doctora Karina Violeta de Meneses, presidenta del Comité de Damas de la CSJI, señaló que la institución que dirige siempre estará lista para colaborar con los necesitados. También dijo que las integrantes del comité que preside comprenden perfectamente los difíciles momentos que viven las madres adolescentes y que por ello siempre están dispuesta a ayudar.

La directora del albergue Araceli Atúncar Valdivieso, agradeció a la comitiva de la CSJI “porque, subrayó, siempre está pendiente de  nuestras necesidades que, en verdad, son muchas, pero las actitudes de ustedes nos impulsan a luchar”.

Cuando una de las señoras de la comitiva de la CSJI trataba de consolar a una de las madres adolescente que estaba llorando, la chica le respondió que sus lágrimas eran de alegría, “pues cuando en algunos momentos que nuestras necesidades y la falta de cariño nos agobian, se producen actos como el de ustedes que nos devuelve la fe que parecía perdida. ¡Qué Dios los bendiga!”.