Este caso de viveza criolla u olvido, se presentó la noche del último
martes (8:30 aprox.), en circunstancias que un mototaxista cuyo nombre es
Marcos C.P. (51), se asomó en forma zigzagueante a un conocido grifo de la
ciudad, con la visible intención de abastecer a su vehículo menor de gas, cuya
placa de rodaje es 3170 – 4Y.
Pero resulta que una vez concluido
su propósito, el chofer, motivado quizás por el licor ingerido, inició la
marcha de su trimovil jalando con fuerza la manguera del surtidor de gas, que
se encontraba aún conectada a su vehículo, situación en que rompió fuertemente
la pistola de abastecimiento, quedando muy deteriorada.
0 comentarios:
Publicar un comentario