La denuncia formal fue presentada por su
propio hijo de 17 años, quien ante el efectivo policial de la comisaría de
Chincha Baja, manifestó que estando él en el interior de su domicilio en
compañía de su madre a quien denominaremos
“María” y de sus hermanos menores de 14, 8 y 5 años, se a-personó de
pronto su padre Marcos H. de 36 años, preguntando que quien tenía su teléfono
celular.
El hermano mayor
al responderle que no lo tenía, el padre insistió de manera prepotente diciendo
que le devuelva su aparato de comunicación, y al no conseguir su objetivo, empezó
a agredirlo físicamente propinándole
duro golpe en los hombros, arrinconándolo contra la pared y arrojándolo
al suelo.
Y cuando éste se
levanta, su papá agresor coge una tabla de madera y con este objeto lo vuelve a
golpear hasta dejarlo semi inconsciente.
Ante esta
censurable situación, la policía se dirigió al modesto hogar de la familia, en
compañía del adolescente afectado y con
el permiso de la madre, los efectivos ingresaron al interior del domicilio, encontrando
allí a la persona denunciada, el mismo que fue conminado a que acompañe a los
agentes al local policial, donde se continúa con las investigaciones
pertinentes.
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