Momentos de alegría se vive en estas horas en el país previas al inicio del nuevo año, primero para despedir este 2014 que se termina y para recibir con mucha fe y esperanza el nuevo año, augurando que todos los anhelos, los proyectos se cumplan, en especial la conservación de la buena salud, también el fortalecimiento de la familia, como el anhelo prioritario de que haya fuentes de trabajo para tener el sostén diario y vivir guiados siempre con la gracia de Dios.
Todo término de cada año, nos induce a recordar con alegría, las satisfacciones que uno ha recibido y en otros casos nos induce a soslayar aspectos pasados que nos han motivado tristeza en lo personal, o mostrando solidaridad con nuestros hermanos peruanos ante alguna circunstancia lamentable.
Igualmente llega la oportunidad en todo ciudadano de hacer un breve análisis de la situación en que vivimos y lo qué hemos hecho este año y si se han cumplido las metas propuestas, a nivel personal, a nivel institucional y también pensar en la vida política de nuestro gobierno nacional y si nuestras autoridades han llegado a satisfacer a la población nacional, regional o local con sus acciones y si las metas trazadas se han cumplido; claro está que estas situaciones no pueden profundizarse a estas horas por la emotividad que nos embarga al inicio de un nuevo año.
A nivel nacional, la población peruana ha estado a las expectativas de la vida política de la nación, y los especialistas en economía de nuestra patria se han pronunciado, como tambien de los problemas que aquejan a la nación, donde sigue teniendo presunta visibilidad la corrupción que se le acecha con ramificaciones a nivel nacional, situación que debe afrontarse desde la permanencia de nuestras autoridades y olvidar el decir, “que no lo hago para no enemistarme con las visibles personalidades porque si no me aíslan o me sacan del puesto”.
El avance de la corrupción es motivado a veces por la forma de gobierno, promovido por las mismas autoridades al hacer un trabajo a escondidas para sacarle provecho personal, situación en que deben pensar nuestras autoridades, y con especial atención en estos momentos en que a la mayor parte de los gobiernos regionales y municipales del país, ingresan a tales estamentos gente nueva y debe tenerse la intención y ejecutar el freno a la corrupción por la salud de los gobiernos regionales, locales y del país en general. A la llegada de las nuevas autoridades de los citados gobiernos-regionales y locales-juegan papel especial los medios de comunicación y en especial los periodistas, que no pueden acudir a instituciones que prestan elementales servicios a ´pedir el regalo´, pues no pueden estar a merced de la donación de “un chancay” por fiestas tradicionales, porque al exhibirlos públicamente estos regalos, se compromete a todos los periodistas que ejercen la delicada y responsable función de un hombre de prensa, porque la población puede comentar que el silencio de irregularidades de un mal servicio o de malas autoridades cuesta un “chancay”.
A la población chinchana, a nuestros comprovincianos y amigos residentes en diversas partes del mundo y que diariamente nos leen a través de las redes sociales y a todos en general, un Feliz y Venturoso año 2015.
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