Al parecer la irresponsabilidad de ciertos conductores
de vehículos, tantos mayores como menores (autos, mototaxis, motocicletas), no
tiene límites porque casi a diario personal de patrullaje motorizado de la
División Policial Chincha, ha intervenido, de acuerdo al Reglamento Nacional de
Tránsito, a choferes que presentaban a simple vista fuerte aliento alcohólico.
La última persona intervenida en esta agravante
situación, se registró alrededor de las siete de la noche de ayer martes en el
barrio Dos Puentes en Chincha, frente a un grifo.
Allí el efectivo policial intervino al automóvil de
placa de rodaje D7M-010, clase M1, modelo Spark Lite, marca Che-vrolet, color rojo,
conducido por Miguel Ángel Ramírez Gutiérrez (37), domiciliado en Villa el
Milagro.
En el lugar anotado, el custodio del orden, mientras
verificaba la documentación respectiva solicitada, pudo percibir en el conductor
un agudo olor a licor, por lo que fue conducido a la comisaría de Chincha.
Frente a estas reiterada situación de peligro común,
se hace necesario que las autoridades correspondientes (municipio, policía,
fiscalía y gobernación), efectúen operativos
inopinados en muchos establecimientos no autorizados que existen en
muchos lugares de la provincia de Chincha.
Precisamente en esos lugares de expendio de licor,
cuyo producto no ofrece ninguna garan-tía al consumidor, se reúnen personas de
malvivir quienes no tienen otro objetivo que planificar algún robo a cometer
contra alguna indefensa víctima.
De aquí que siempre es bueno tener presente el dicho:
“Más vale prevenir que lamentar”. Librémonos pues con anticipación nuestra
entera responsabilidad. Ustedes tienen la palabra.
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