Mal hábito de arrojar basura en céntricas calles de Chincha LUGARES APROPIADOS SON TERRENOS SIN CERCAR Y VIVIENDAS DESHABITADAS

Otro problema de Chincha y seguramente de otras provincias del país, es sin duda la falta de la cultura de limpieza, la falta del cuidado de la salud y tal vez la irresponsabilidad de algunos vecinos, quienes se descuidan del paso del camiones recolectores de basura, utilizando la vía más fácil, dejar las bolsas de desperdicios en los solares abandonados a altas horas de la noche o las primeras del día.

Las casas destruidas, convertidas hoy en solares a raíz del lamentable terremoto ocurrido el 15 de setiembre del 2007, ha propiciado que este problema del arrojo de basura en calles, se haya fortalecido.

Al paso de los años, en campañas políticas cada cual candidato ha criticado a las autoridades de turno por la mala atención al servicio de Baja Policía, y cuando han llegado a tener en sus manos la calidad de ser autoridades o tener las conexiones hacia ellas, han silenciado, porque han visto que el problema es complejo, porque hay hasta profesores o directores de planteles educativos que agarran las bolsas de basura de sus viviendas y cuando se dirigen a sus centro de trabajo, lo dejan caer cuando pasan por solares aban-donados o esperan “que nadie los vea” para arrojarlas, y siguen, como si nada hubiesen hecho; esto es falta de cultura.

Las nuevas autoridades edilicias de los municipios deben tener presente este otro problema de Chincha y buscarle la solución, cuando menos, contratar personal para que trabajen los domingos y días festivos para que se encarguen del recojo de la basura.

Pero el problema no solo es buscar más personal, sino que nuestras autoridades trabajen con transparencia, cuidando los combustibles y lubricantes que se puedan utilizar en el servicio de baja policía, tener un programa de mantenimiento de las maquinarias, así como coordinar con los directores de planteles y también de instituciones privadas para motivar en la población la responsabilidad de cuidar que estas, no arrojen basura en la calles, que de paso se apoyará en la preservación de la salud del vecindario.

La convocatoria para la solución de este problema tiene que ser permanente por el bien de la población, y por la salud.