¡Feliz
Día Papá!
Nuestro
mensaje:
Queridos
Asociados, mejores amigos
Corresponde a nuestro deber institucional y
personal saludar a los padres en su día, especialmente a los papás de la APCYJECH,
amigos compañeros, colegas, con quienes compartimos propósitos, compromisos e
ideales comunes como asociados de esta entidad, así como, esfuerzo, lucha,
sacrificio, esperanza y emotivos anhelos como padres, en este deber u obligación
que nos imponemos, como compromiso de vida por nuestros queridos hijos en el
irrenunciable afecto y amor de quererlos amarlos, protegerlos y defenderlos
hasta morir y más allá, si hubiera otra vida después de la muerte.
Para
todos, nosotros como hijos de un padre, que provenimos Dios mediante del copartícipe
autor de nuestros días, no podemos nunca dejar de reconocer lo importantísimo
que es o fue ( si es que acaso no existe físicamente) para nuestra vida,
nuestro siempre querido, amado y nunca olvidado ¡PAPÁ!.
En tal virtud con ánimo disposición y fuerza,
RINDAMOS nuestro sentido y sincero homenaje con todo respeto, profundo sentimiento
y emocionada grata exaltación al Padre. En el mundo, la sociedad, la familia y
la humanidad rescata en esta ocasión la figura de este hombre como un ser emblemático,
modelo, paradigma referente valioso de una personalidad severa pero también
dulce, fuerte, potente firme y centrado, pero además sensible, subjetivo y
tierno en su querer profundo para sus hijos; experimentado y amplio por su
saber y experiencia que los vierte a raudales por procurar lo mejor para sus
hijos.
Al
homenajear a nuestros padres, cumplamos con lo que es una reclamación,
exigencia y compromiso que como hijos nos corresponde, saludarlos con respeto y
veneración y regalarles todos los días nuestra vida, ¡eso es sincera gratitud
por siempre!, ¡SINCERA Y ETERNA GRATITUD ENVIDA.!
Tangamos
presente que a nuestros padres no le llena la satisfacción, la alegría, el regocijo,
la felicidad, el saludo, el abrazo ni el regalo y la sonrisa de un momento,
medio día, o de todo un día, si antes o después, le das vacío indiferencia,
ausencia, olvido, preocupación, problemas, dolores, tristeza, llanto y puro sufrimiento;
acaso lo material, fingido, suntuoso pero efímero de un día vale más que darle
el apoyo , sobre todo la alegría, el cariño, el abrazo y el cuidado de todos
los días, ¡NO! para nuestro padre nada es más valioso alegre y grato que
darle todo el tiempo de nuestra vida pero todo bueno hasta el fin de su existencia.
Juan
Carlos Lurita Uchuya Presidente de APCYJECH
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