El asombroso
incremento de vehículos automotores y con ello el desorden, caos y ruidos
generados diariamente por esas máquinas que circulan por Chincha, constituyen
en la fecha un dolor de cabeza para la entera población de esta provincia.
Ante esta preocupante situación que viven los chinchanos
-así como los que no lo son- existen serias protestas de parte de ellos, tales
como las emanaciones de dióxidos de carbono (CO2) y el molestoso
ruido ensordecedor que hacen los “jaladores” de autos colectivos que se apostan
por lugares céntricos de la ciudad, utilizando para esto los conocidos megáfonos.
Este mal ya endémico que apreciamos todos los días, lo
podemos comprobar por los alrededores del Mercado de Abastos de Chincha,
específicamente en la plazuela Bolognesi, como en la primera cuadra de la
avenida Tupac Amaru recientemente inaugurada en esta esta provincia, donde se
han establecido varios comités de autos que cubren la ruta hacia conocidos
distrito de la zona.
Por ello se hace un llamado a los que tiene que ver
con este asunto, se entiende y se conoce que en estos últimos años, la
población y vehículos automotores ha crecido enormemente como toda ciudad que
marcha al progreso, pero también se hace necesario que la población necesita
tranquilidad y paz y sobre todo que los protagonistas hagan conciencia que debe
imperar el orden como lo ha establecido el Municipio Provincial de Chincha.
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