Desde hace varios meses en la provincia de Chincha, la empresa
Telefónica no viene efectuando la distribución domiciliaria de los comprobantes
de consumo por el servicio que presta, perjudicando así a los usuarios,
motivando con ello que se deje de pagar en forma puntual este servicio y de
paso aumentando la morosidad.
Anteriormente los usuarios recibían en sus domicilios los comprobantes
con el detalle de facturación de cada mes, documento con lo que los usuarios
acudían a las oficinas de la empresa Telefónica o a los centros autorizados
para la cobranza a cancelar en forma puntual su deuda; ahora no se tiene el
comprobante para efectuar el pago y los usuarios tienen contratiempos para
recabarlos ante la Oficina principal o solicitándola a través del servicio telefónico,
o por Internet, sistema en que para muchos le es imposible lograr el objetivo.
Los reclamos adquieren mayor notoriedad cuando a través del
servicio telefónico se le contesta al usuario que hay pro-blemas de conectividad
o que se les llamará en breve, respuesta que no llega, más bien el tiempo
apremia y lo que llega es el vencimiento de pago y la acumulación de dos
recibos para después aplicársele el servicio restringido y acumular intereses.
No cabe duda que la empresa Telefónica se desprende de la
obligación de la distribución de estos comprobantes para ceder esta labor a otras
empresas que realizan esta labor, la que también incumple con la distribución, motivando perjuicio para los usuarios.
Nuestras autoridades deben velar por el
cumplimiento del buen servicio, que comprende la entrega
puntual de los recibos de consumo a fin de que los usuarios tengan la facilidad
de dirigirse a efectuar el pago teniendo a la mano los citados comprobantes.